Ayuntamiento de Riaño

El conjunto que rodea a la Iglesia, fue construido por el Ministerio de Obras Públicas después de anegarse el embalse en el año 1987. El hórreo procede del pueblo de Salio, y es del denominado tipo leonés. Tejado a dos aguas y planta rectangular. El campanario de arquitectura vanguardista lo colocó el Ministerio de Obras Públicas y de él cuelgan las campanas de Riaño ( las más grandes ) y de otros pueblos anegados por el embalse.
Es un edificio románico rural del siglo XIV. Está construido de mampostería- piedra irregular- y sillares (piedras labradas) enmarcando las puertas y en las esquinas y ventanas. Tiene una espadaña con vanos para colocar las campanas y un pórtico con estructura de madera. La puerta principal (para entrada de la gente) y la de difuntos (por donde se metían los muertos para funeral) en la pared sur, se enmarcan con un arco de medio punto.

En su interior es de planta rectangular, con un ábside cuadrado cubierto de pinturas en la cabecera y otro ábside lateral cuadrado a la izquierda. En la parte posterior se sitúa el coro de madera. Al fondo hay un panel donde se describe el traslado desde el emplazamiento original desde el pueblo de La Puerta. Al proceder a su traslado se descubrieron las pinturas medievales que estaban tapadas por cal. En la Edad Media, cuando había pestes se encalaban las paredes para desinfectar.

El ábside que contiene las pinturas está formado por dos arcos ojivales, ya de transición al estilo gótico. El primero apoyado sobre capitales y pilares y el central apoyado en ménsulas de piedra.
Las pinturas son autor desconocido. En aquella época la gente era analfabeta y había que enseñarla a través de símbolos en las pinturas y esculturas de las iglesias. Simbolizan el universo lleno de estrellas y para representar al mal, al diablo, se pintaron dragones con cabeza perruna, con grandes ojos, con orejas puntiagudas y alargadas mandíbulas amenazantes. Su cola es de serpiente. Los dragones simulan las aristas de una bóveda de crucería, ya propia del arte gótico.
En el ángulo superior, donde confluyen los dragones, hay dos símbolos dentro de un círculo. El primero es una estrella de seis puntas, son las puntas que sujetan la bóveda celeste. Y en el segundo círculo, en el segundo tramo de la bóveda, se dibuja un sol, que ilumina el universo, ambos de origen vadiniense. A pesar de haberse pintado en el siglo XIV, el pintor plasmaba en la pared los símbolos cántabros que se habían ido transmitiendo de generación en generación, formando parte la cultura vadiniense del sustrato cultural de la Comarca.

En la pared del fondo hay símbolos cristianos (San Antón con porracha o cayado, protector de los ganados, la cruz, los símbolos de la Pasión de Cristo). En el ángulo superior izquierdo una estrella de 8 puntas, símbolo de plenitud y regeneración. Arriba a la derecha el árbol de la vida.
En ambos lados se pueden observar dos cabezas sangrando. Los cántabros cortaban la cabeza a sus enemigos y las enterraban en los lugares sagrados. Dicho historia se transmitió siglo tras siglo y el pintor plasmó en un lugar sagrado cabezas cortadas. En la pared lateral tenemos pintada una cruz enmarcada por una ventana terminada en arco ojival apuntado.
Sobrepuestas a las pinturas se realizó un Vía crucis barroco ya del siglo XVII- XVIII. Se pueden leer los textos en castellano antiguo. En otras paredes de la Iglesia se conservan restos de pinturas como el trozo que representa a Cristo en la cruz y a los dos ladrones. En el ábside lateral cuelga un calvario formado por una talla de cristo en la cruz, barroca; a su derecha talla gótica de Santa Águeda con el símbolo del martirio (bandeja con los pechos cortados) y a la izquierda talla gótica de Santa Inés, ambas siglo XIII-XIV. En el suelo una pila bautismal con una cruz griega tallada.